Dra. Marcela Rodríguez Flores
La obesidad ha sido reconocida mundialmente como una enfermedad crónica por muchas organizaciones médicas, incluyendo la Organización Mundial de la Salud (OMS) y Federación Mundial de la Obesidad (WOF). Eso no es solamente debido a su impacto negativo en la salud, sino también porque muchos estudios demuestran claramente que el cuerpo reacciona con frecuencia a la pérdida de peso, con cambios hormonales y del metabolismo de una manera que lleva a la recuperación de peso.
Por eso, cambios en el estilo de vida, en el tipo de dieta y ejercicio no son suficientes para muchas personas con obesidad para perder peso y mantenerlo a largo plazo. Se requieren tratamientos médicos adicionales. Los medicamentos recetados y la cirugía bariátrica son dos opciones que han demostrado que se puede lograr una pérdida de peso sostenible acompañada de mejoría de la salud del paciente.
Se pueden encontrar en el mercado varios medicamentos con receta, sin embargo, pocos de ellos tienen datos suficientes que demuestran que son eficaces y seguros en el largo plazo. Actualmente, hay dos medicamentos para el tratamiento de la obesidad a largo plazo (>12 meses) aprobados por haber demostrado eficacia para la pérdida y el mantenimiento del peso, con reducción de factores de riesgo cardiovascular, y seguridad: orlistat y liraglutida. Para obtener más detalles sobre la eficacia, seguridad, y efectos secundarios de estos medicamentos disponibles, haz clic aquí.
La buena noticia es que estos medicamentos han demostrado ser eficaces, y hay continuos avances hacia más y mejores herramientas terapéuticas que se pueden usar para tratar la obesidad de una mejor manera. Es extremadamente importante que la gente que vive con obesidad o exceso de peso busque atención médica de largo plazo con un médico que utilice un equipo multidisciplinario capaz de tratar todos aspectos de la enfermedad con todas las herramientas que han demostrado ser seguras y eficaces.